DIARIO DE NAVARRA DESTACA LOS TRABAJOS DE PMM RECICLAJE CREATIVO COMO UNO DE LOS 5 LUGARES RETROFUTURISTAS ÚNICOS, DENTRO DEL MOVIMIENTO STEAMPUNK EN NAVARRA.

Una exposición de tintes steampunk 

Si una de las características del steampunk es, precisamente, convertir lo antiguo en nuevo y lo nuevo en antiguo, Cortes puede presumir de ello y convertirse en el lugar de referencia del steampunk en Navarra con la Exposición privada de Pedro Mari Monasterio.

Ejemplo de artesanía por excelencia en la Comunidad Foral, en esta galería se expone con el título: "Dame la mano y vamos a darle la vuelta al mundo", una inmensa colección de esculturas realizadas con materiales reciclados. Robots, lámparas, esculturas de madera y metal... estas son solo algunas de las verdaderas obras de arte elaboradas minuciosamente a mano. 

¡Por cierto! Si quieres saberlo todo sobre esta exposición y su localidad, te recomendamos que le eches un vistazo al reportaje de Edurne Suberviola en la revista de turismo Conocer Navarra (número 70).

[Turismo steampunk en Navarra: descubre 5 lugares retrofuturistas únicos. Diario de Navarra]

"Distopía", una de las piezas de la exposición de Reciclaje Creativo, en Cortes. 

QUÉ ES EL STEAMPUNK

Es un subgénero literario surgido en los 80, impulsado por las corrientes retrofuturistas. Algunos de los elementos que predominan en el ambiente steampunk son las tecnologías mecánicas basadas en la Revolución Industrial o las indumentarias, principalmente victorianas y románticas. Esta estética, que entremezcla lo vintage y retro con las últimas tecnologías y tendencias, está influenciada por la literatura de Julio Verne o H. G. Wells. 

Curiosamente, el subgénero del steampunk que está prevaleciendo actualmente en todos los estamentos artísticos es el cyberpunk: una visión apocalíptica del futuro donde las máquinas se han hecho con toda la sociedad y han subordinado al ser humano. Un movimiento que llama poderosamente la atención, con el "repentino" auge de las inteligencias artificiales. 

En los últimos años, el steampunk/cyberpunk comienza a trascender lo literario, llegando a concebirse como un movimiento contracultural, que busca la crítica a la sociedad consumista y el reconocimiento y la puesta en valor de las creaciones artesanales y/o propias por encima de las manufacturadas al por mayor.